jueves, 9 de febrero de 2012

El ADN puede proyectar copias de sí mismo por medio de ondas electromagnéticas.

Un reciente experimento experimento realizado por Luc Montagnier premio Nobel de Medicina en 2008 por descubrir el virus del sida y un equipo de científicos en el seno de la World Foundation for AIDS research and Prevention (UNESCO), Paris, France, han descubierto que el ADN puede replicarse en sus estructuras mediante la adecuada utilización de las ULF(Frecuencias extremadamente bajas). En concreto, sienta las bases de la relación existente entre el ADN y las ULF en los seres vivos, y curiosamente enlaza con el espectro de resonancias de las RS (Resonancias Schumann). El medio en el que el experimento ha sido reproducido es el agua, por lo que los paquetes de datos pueden replicarse, sentando así las bases de la Radiofrecuencia Cuántica Diferencial, aplicada a las estructuras fundamentales de los seres vivos.

Según el Nobel francés, bajo ciertas condiciones, asegura Montagnier, el ADN puede proyectar copias de sí mismo por medio de ondas electromagnéticas; esas mismas ondas pueden ser «recogidas» y almacenadas en agua pura y, gracias a ciertos efectos cuánticos, crear en ella una «nanoestructura» de idéntica forma al ADN original; si además, en la solución «receptora» de las ondas se añaden enzimas replicadoras de ADN, éstas pueden «recrear» el ADN a partir de la «nanoestructura» teletransportada, como si el ADN original estuviera realmente allí mismo.

En esencia, los científicos han utilizado dos tubos de ensayo (ver gráfico). El primero contenía un fragmento de ADN (de unos cien pares de bases de longitud). El segundo, agua completamente pura y sin resto alguno de materia orgánica en su interior. Ambos tubos se encerraron después en una cámara especial que anula el campo electromagnético natural de la Tierra, con objeto de que éste no contaminara los resultados del experimento. Por último, ambos tubos fueron enrollados en tubos de cobre de los que emanaba un ligero campo electromagnético.

El campo magnético producido por la excitación, se mantuvo durante 18 horas y la replicación tuvo lugar. El experimento es altamente reproducible y ha sido documentado en DNA waves and water, documento que pueden descargar desde el servidor de ArxiV,

http://arxiv.org/abs/1012.5166v1









La importancia de este estudio es crucial porque sienta las bases de la Radiofrecuencia Cuántica Diferencial, en relación con la estructura del enrejado del éter y la lógica de los osciladores armónicos en relación con la replicación de estructuras y subestructuras, así como la clara reproducción empírica de las ondas fase. El hecho de que en esta ocasión el experimento provenga del Premio Nobel, consolida las bases científicas de esta nueva visión de la ciencia en el marco de la relación entre las ULF y las estructuras fundamentales de la materia y los seres vivos.


Fuentes:

http://arxiv.org/PS_cache/arxiv/pdf/1012/1012.5166v1.pdf

http://arxiv.org/abs/1012.5166v1

http://starviewer.wordpress.com/2011/01/18/el-premio-nobel-luc-montagnier-descubre-que-el-adn-puede-teletransportarse-mediante-las-estructuras-subcuanticas-atraves-del-agua/

http://www.abc.es/20110124/ciencia/abci-teletransportacion-201101240813.html#formcomentarios


sábado, 4 de febrero de 2012

Atenea y el olivo

Palas Atenea (Palas significa "nueva hija"), diosa de la guerra, la sabiduría y las artes para los griegos, y que nació milagrosamente de la frente de su padre, el gran Dios Zeus, tras haberse tragado éste a Metis embarazada, es para los griegos el origen de tan preciado árbol. Cecrops fundó una pequeña colonia en Atica, en el siglo XVII a.C., que atrajo a los habitantes de la zona, hasta entonces nómadas, para que se asentaran allí. Palas Atenea disputaba a Poseidón el honor de darle nombre a esa ciudad, razón por lo que la asamblea de los dioses, acordó concedérselo a aquel de los dos adversarios que les proporcionase el invento más útil a sus habitantes. Poseidón, golpeando con su tridente el suelo, hizo salir de la tierra un magnífico caballo, hermoso, rápido y capaz de arrastrar los más pesados carros e incluso de ganar grandes combates.

Atenea sin embargo, hizo brotar del suelo un olivo, árbol que era capaz de dar la llama para iluminar, de suavizar las heridas, y de ser un alimento precioso, rico en sabor y dador de energía. Consideraron que el olivo era de mayor utilidad que el caballo, por lo que aquella ciudad pasó a llevar el nombre de la Diosa que lo creó, Atenas. Este olivo que brotó en la Acrópolis de Atenas fue rodeado por un muro y guardado por guerreros especialmente consagrados para defenderlo. Nos dicen que cuando los enemigos de Atenas se aproximaban, todos los ciudadanos se agrupaban dentro de las murallas, junto al olivo, hasta que el peligro cesaba. Incluso, tras las guerras médicas y tras el incendio de la Acrópolis y del olivo sagrado, cuando los atenienses volvieron a su ciudad y encontraron los monumentos destruidos, descubrieron sin embargo que el olivo plantado por la diosa Atenea, había echado retoños de su raíz, superando así la destrucción, y mereciendo ser el símbolo de la inmortalidad. Desde la derrota de Jerges en las guerras médicas el tetradacma griego lleva una rama de olivo como símbolo del renacimiento de Grecia.

Fuentes:

http://es.wikipedia.org/wiki/Atenea

http://www.iuventa.org/index.php/El-olivo-en-la-mitologia-y-la-leyenda.html

http://priegodeandalucia.blogspot.com/2010/02/palas-atenea-y-el-olivo.html